La desconexión de la ciudad con su río y su entorno natural es parte del diagnóstico inicial de esta ciudad, realidad que comparten ambas comunas, por lo cual la búsqueda de una relación con su río no puede agotarse en solo llegar a él: la ciudad debe ser capaz de integrarlo de diversas formas en sus espacio, creando situaciones para su contemplación donde pueda apreciarse y ser observado como parte integrante del paisaje urbano. Dicha situación, con escasas excepciones, no se produce en nuestra ciudad.