La pronta entrada en operación del puente Tren-Tren, tendrá entre otras consecuencias la obsolescencia del puente vehicular existente como vía de flujo motorizado.
Esta importante estructura urbana quedará en desuso pudiéndose transformar en un espacio inseguro y sumarse al abandono generalizado que presenta el lugar o propiciar su reconversión como una oportunidad para reforzar la vinculación de la ciudad con el río y crear un espacio público peatonal intercomunal, de convergencia ciudadana, para reforzar la instancia de una ciudad más integrada y relacionada su río y entorno natural.